Indiferencia hasta puntos extremos, y creo que en este momento no tengo mejor descripción. Total indiferencia; me da igual el punto muerto, me la suda la Luna y paso de los sueños rotos. A ti te da lo mismo, y a mi no me importa.
He decidido vivir sin preocupación alguna. Soñar sin límite y dejar a un lado los suspiros innecesarios, esos con los que quieres dar a conocer que te falta algo. Y es que no hay queja alguna, muchas veces unas cosas suprimen, aplastan, y dejan en el olvido otras.
Voy a fumarme la Luna y a beberme el Sol, y con ese colocón dormiré en tu colchón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario